lunes, enero 04, 2010

Esos aplausos



Eduardo Galeano, en la Universidad de Córdoba, al recibir el título Honoris Causa, a fines de 2008. El aplauso unánime y final no es más que una consecuencia inevitable.

Anotaciones:
"Predicó en el desierto y murió solo.
Simón Rodríguez, que había sido maestro de Bolívar, anduvo medio siglo por los caminos de América, a lomo de mula, fundando escuelas y diciendo lo que nadie quería escuchar. Un incendio se llevó casi todos sus papeles. Éstas son algunas de las palabras que sobrevivieron.
* Sobre la independencia:
Somos independientes, pero no libres. Hágase algo por unos pobres pueblos que han venido a ser menos libres que antes. Antes tenían un rey pastor, que no se los comía sino después de muertos. Ahora se los come vivos el primero que llega.
. * Sobre el colonialismo mental:
La sabiduría de Europa y la prosperidad de los Estados Unidos son, en América, dos enemigos de la libertad de pensar. Nada quieren las nuevas repúblicas admitir, que no traiga el pase... ¡Imiten la originalidad, ya que tratan de imitar todo!
* Sobre el colonialismo comercial:
Unos toman por prosperidad el ver sus puertos llenos de barcos... ajenos, y sus casas convertidas en almacenes de efectos... ajenos. Cada día llega una remesa de ropa hecha, y hasta de gorras para los indios. En breve se verán paquetitos dorados, con las armas de la corona, conteniendo greda preparada «por un nuevo proceder», para los muchachos acostumbrados a comer tierra.
* Sobre la educación popular:
Mandar recitar de memoria lo que no se entiende, es hacer papagayos. Enseñen a los niños a ser preguntones, para que se acostumbren a obedecer a la razón: no a la autoridad como los limitados, ni a la costumbre como los estúpidos. Al que no sabe, cualquiera lo engaña. Al que no tiene, cualquiera lo compra."

Post publicado desde Mar de las Pampas.